Hay una larga tradición urbana de chivos expiatórios: las persecusiones e agresiones contra judíos, negros, árabes, gitanos, sudacas o xarnegos permiten que los frustados y agresivos cidadanos empiecen a repartir golpes contra minorias débiles y sin respuesta. Otra variante eficaz del objeto substitutivo es el deporte. La ritualización de los actos agresivos y el auto control permiten el simulacro de una luta, de una agresión entre deportistas, en la que el público participa y una nueva geración no se contenta con la violencia simulada, sino la materializa en la gradas o fuera del campo, irritados porque han comercializado su válvula de escape.
Manuel Vazquez Montálban, “El Delantero Centro Fue Asesinado el Entardecer”
1 comentário:
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